Otra película de Olayo Rubio, otra película con el discurso
muy bien fundamentado en contra de la manipulación de las masas por medio del
cuarto poder: los medios de comunicación. Nos presenta un recuento bastante
claro de lo que acontece en el país en los últimos 100 años o más y como es que
el fenómeno Molotov pasa de ser un grupo de rock a un escape de injurias
fundamentadas por la represión y el colapso de una sociedad que no levanta la
voz.
Villoro, en una de sus últimas intervenciones en la película
me deja un mensaje, que no lo dice explícitamente
pero es lo que me da a entender: El voto es una ilusión de poder. “La gente
vota por Fox y gana, la gente le otorgó la presidencia y se da cuenta que en la
democracia se pueden equivocar”. La gente solo tiene el poder el día de las
elecciones, no más. En la toma de decisiones del país la gente no entra, solo
tiene una decisión cada 6 o 3 años, por eso que para mí el voto es una ilusión
de poder. Nunca eh votado, no me jacto pero tampoco me arrepiento de no haberlo
hecho, ante esta premisa de Villoro todos los que votaron se equivocaron en la
elección de sus últimos dos presidentes ya que en la teoría los anteriores
fueron impuestos. La democracia o su
mayor representante: el voto, no es un indicio de cambio o de poder del pueblo,
es un elemento más de un poder que el pueblo cree tener ante un sistema
político que hoy en día da las 4 opciones más faustuosas y circenses que me han
tocado vivir.
La película y lo que representa Molotov para una generación
que venía de ser censurada nos invita a que el cambio y la conciencia que
necesitamos está en capacidad del cambio propio, en la elección de levantar la
voz y permear una actitud de queja, conciencia, revolución, amor y exigencia al
pequeño o gran alcance que tiene cada uno de nosotros. Ese alcance que podemos
permear es el verdadero poder de cambio, es el verdadero Gimme the POWER que
necesitamos.
Este no es un post que invita al voto nulo o a la ausencia de
taches en boletas electorales, este post es una invitación al cambio personal y
al levantamiento de un poder que es el de tratar de que tu cambio
permee a la mayor cantidad de gente a tu alrededor y que no sientas que por
votar has cumplido con tu deber y exigencia a personas que te ven la cara cada
vez que puede.
¡Que se sienta el POWER mexicano! Porque somos más jalamos
más parejo, no hay que estar siguiendo a una bola de pendejos. ¡Viva México
cabrones!
